El hatillo al hombro

Valdemanco – Collado de Cancho Gordo – Convento de San Antonio - Bustarviejo

Ver en Google Earth



DE CANTO A MÍ MISMO

Soy un vagabundo en un viaje perpetuo,

mis señas son un impermeable, buenos zapatos y un bastón cortado en el bosque;

ningún amigo mío se releja en mi silla,

no tengo cátedra, ni iglesia, ni filosofía;

no llevo a ningún hombre a la mesa, a la biblioteca o a la bolsa,

pero a cada uno de vosotros, hombre o mujer, lo llevo a una cumbre,

mi mano izquierda ciñe tu cintura,

mi derecha señala paisajes de continentes, y un camino claro y público.

Ni yo ni nadie puede andar por ti ese camino,

debes andarlo por ti mismo.

No está lejos... está a tu alcance,

tal vez has estado en él desde que naciste sin saberlo,

tal vez está por todas partes, en el mar y en la tierra.

Échate el hatillo al hombro, yo me echaré el mío y apresurémonos;

encontraremos maravillosas ciudades y naciones libres en el camino.

Walt Whitman














1 comentario:

LuisBasGz dijo...

Bonito